Categoría | Salud Mental
02/09/2019
Depresión adolescente, ¿qué hacer?
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La adolescencia es una etapa que conlleva muchos cambios tanto externos como internos. Los jóvenes empiezan a fijarse en más cómo lucen y la manera cómo los percibe el mundo; el pensar en ello y buscar la aceptación, puede llegar a desencadenarse la depresión.
Este trastorno, también conocido como depresión juvenil o de la adolescencia, afecta a al 8% de la población adolescente peruana, según el Instituto Nacional de Salud Mental. A continuación, te presentaremos los posibles síntomas, causas y lo que puedes hacer al respecto.
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Síntomas
Para detectar los síntomas de este trastorno, debes prestar atención a la rutina de tu hijo; pues por lo general esta cambia cuando se sufre de depresión. Los síntomas más comunes de la depresión en un adolescente duran un aproximado de dos semanas, según la Biblioteca Nacional de Medicina en EE.UU. Esta, se manifiesta de la siguiente manera:
- Desordenes de sueño: Esto va a ambos extremos; si tu hijo adolescente pasa demasiado tiempo durmiendo o todo lo contrario, podría estar sufriendo este trastorno.
- Cambios repentinos de ánimo: Si tu hijo está tranquilo y repentinamente pasa por un momento de mucha irritabilidad o tristeza.
- Cansancio constante: Se siente cansado desde el momento en el que despierta hasta que se va a dormir. Se mueve con pesadez.
- Baja autoestima: Si tiene poca tolerancia hacia las críticas constructivas y realiza comentarios despectivos hacia sí mismo.
- Desgano al realizar actividades que solían gustarle: Si tu hijo ya no disfruta -repentinamente- realizar sus hobbies.
- Dolores corporales constantes: Presenta constantemente dolores de cabeza, estomacales o de otras áreas del cuerpo y suele ir a enfermería.
- Trastornos alimenticios: ¿Tu hijo tiene inapetencia o come demasiado? Durante la etapa de depresión, un adolescente podría incluso desarrollar trastornos alimenticios como bulimia y anorexia.
- Distanciamiento: Si tu hijo actúa violentamente, se pelea con otros compañeros o simplemente recurre a alejarse de sus amigos y la familia.
- La aparición de vicios: La depresión adolescente suele ser causante de la aparición de vicios como el alcoholismo, tabaquismo, drogadicción o ludopatía.
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Causas
El hecho que la adolescencia es una etapa donde se presentan cambios hormonales; los adolescentes suelen pasar por factores de estrés que causan la depresión, tales como:
- Los conflictos en busca de independencia: Las constantes discusiones con los padres con el fin de buscar más independencia en su vida.
- Rupturas amorosas: Esto incluye tanto la ruptura con un novio/a o la separación de los padres.
- La muerte de algún pariente o amigo
- El fracaso escolar: desde el bullying hasta la baja de notas.
- Abuso o maltrato durante la infancia.
- Crianza y atención deficiente por parte de los padres.
Además de estas causas, hay ciertos factores psicológicos y genéticos que podrían aumentar las posibilidades que su hijo sufra de trastorno depresivo. Entre estos, están:
- Su género; estudios demuestran que las mujeres tienen el doble de probabilidades de sufrir este mal.
- Antecedentes familiares de trastorno depresivo.
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Lo que puedes hacer
La adolescencia es una etapa complicada para todo aquel que la está pasando; sin embargo, una de las mejores maneras de evitar este tipo de trastornos psicológicos es la comunicación constante con los hijos; pues esto además de abrir una puerta al entendimiento, disminuye el nivel de estrés en los hijos. Por esa razón, el primer paso a realizar tras la detección de la depresión en un adolescente, es:
- Dialogar: Trata de indagar las causas de la depresión; asimismo, el diálogo podría permitir que el adolescente se abra y admita la situación por la que está pasando.
- Escuchar: Tómate el tiempo de escuchar lo que le inquieta o preocupa; ponte en sus zapatos y elimina los prejuicios.
- Comprender: El apoyo familiar es esencial para la recuperación y prevención de este trastorno; por esa razón, ante estos episodios evita disciplinar a tu hijo con vergüenza o castigos, eso no solucionará nada.
- Convencerlo de ir a una terapia: Además de darle apoyo familiar, déjale la opción abierta de ir a una terapia con un médico especialista en psicología. Con esto, no nos referimos que le digas lo que debe hacer, pero sí que le hagas saber que tiene esa opción para salir de esta situación y que cuenta con tu apoyo.
- Planificar una rutina que le de salud a su mente: El ejercicio y los buenos hábitos de vida le darán positivismo a su vida; si no se siente capaz de seguirlos, sigue esta rutina con él.
Por último, recuerda que si tu hijo está sufriendo de estos episodios, probablemente vuelva a pasar por lo mismo en un tiempo; por lo que no es un problema que se le deba restar importancia, por lo que te recomendamos acudir a un médico especialista.02