¿Qué es?
El tétanos o tétano es una enfermedad que es provocada por potentes neurotoxinas (sustancias capaces de alterar el funcionamiento nervioso y causar la muerte) que son producidas por una bacteria (Clostridium tetani).
¿Cómo se ocasiona?
La bacteria del tétano está en el suelo, en todas partes, en los metales en oxidación, sedimentos marinos, en el medio inorgánico y en las heces de determinados animales.
Penetra en el cuerpo por heridas abiertas que toman contacto con estiércol contaminado, tierra o por cortes o la penetración de algún objeto oxidado: clavos, cuchillas o anzuelos; también por mordeduras de perro, etc.
¿Cuáles son los síntomas?
La enfermedad empieza con leves espasmos en los músculos de la mandíbula, que suelen afectar al cuello, espalda, tórax y a los músculos abdominales; puede haber problemas respiratorios a causa de los espasmos. Estos provocan desgarros y fracturas musculares.
Hay babeo, fiebre, excesiva sudoración, micción o defecación incontrolables, espasmos en manos, pies o en ambos, dificultades para tragar e irritabilidad.
Tratamiento
Toda herida debe limpiarse bien, eliminando la fuente de la toxina; hay que quitar los tejidos muertos y dejarla expuesta al aire, pues el oxígeno mata a las bacterias anaeróbicas.
Consultar de inmediato con un médico que hará lo necesario profesionalmente, diagnosticando y prescribiendo.
Es muy importante colocarse la vacuna antitetánica, que, repetimos, será recomendada por el médico.
¿Cómo se previene?
Mediante la vacunación. Se recomienda reforzar la vacuna cada 10 años. Se vacuna cuando el paciente ha sufrido un pinchazo, una herida o corte y no se sabe si está vacunado.
La vacuna es sumamente importante. El tétano no es para tomar a broma. Es la vida la que está en juego.
Revisado por la Dirección Científica y Académica de Auna