¿Últimamente tienes muchas ganas de orinar o sientes ardor al hacerlo? Si la respuesta es sí, ¡Ten cuidado! Podrías estar sufriendo de una infección urinaria, una afección muy común y que se presenta con mayor frecuencia en temporada de verano. Si quieres saber más sobre las infecciones de las vías urinarias, qué son, cuáles son sus síntomas y opciones de tratamientos, continúa leyendo este artículo en nuestro blog Auna.
Las infecciones de las vías urinarias son una afección muy común que es causada por bacterias que ingresan al tracto urinario, compuesto por los riñones, los uréteres, la vejiga y la uretra. La mayoría de infecciones urinarias se producen en la vejiga o uretra, aunque también pueden generarse en los riñones y uréteres.
Las infecciones urinarias se pueden clasificar en dos categorías principales: infecciones del tracto urinario inferior e infecciones del tracto urinario superior. Si te interesa conocer más sobre ellas, aquí te contamos un poco más de cada una.
Las infecciones del tracto urinario inferior (ITUI) son las más comunes. Generalmente afectan a la vejiga (cistitis) o a la uretra (uretritis) y son causadas por bacterias que ingresan al tracto urinario a través de la uretra. Si bien, los síntomas comunes de las ITUI incluyen una frecuente necesidad de orinar y ardor durante la micción, puede presentar otras señales de alerta a las que hay que prestarle atención.
Síntomas de Cistitis. Presión en la pelvis, molestias en la parte inferior del abdomen, micciones frecuentes y dolorosas, sangre en la orina.
Síntomas de Uretritis. Sensación de ardor al orinar, secreciones.
Las infecciones del tracto superior (ITUS) generalmente son causadas por bacterias que se han propagado desde la vejiga hasta los riñones. Las ITUS son infecciones que se generan en los uréteres y los riñones (pielonefritis aguda) y pueden presentar síntomas como fiebre y dolor agudo en la espalda.
Síntomas de infecciones del tracto urinario superior: Dolor de espalda o en un costado, fiebre alta, temblores y escalofríos, náuseas y vómitos.
Una de las primeras causas de infección urinaria, es la poca ingesta de líquidos. La distancia que existe entre el ano y la uretra en las mujeres es muy corta, por tanto no es raro que pasen gérmenes desde el ano a la uretra. Si bien el sistema urinario tiene defensas que impiden el ingreso de estas bacterias, cuando estas defensas fallan, las bacterias pueden proliferar hasta convertirse en una infección.
E. coli que es el germen más frecuente se duplica cada 20 minutos. Cuando nosotros tomamos mucho líquido, orinamos con frecuencia, y evitamos que esta batería se multiplique muchas veces. Sin embargo, si no tomamos líquido, orinamos con muy poca frecuencia y le damos opción a este germen que se reproduzca en grandes cantidades ocasionándonos la enfermedad.
Por lo general, son causadas por la Escherichia coli (E. coli), una bacteria que se encuentra en el tracto gastrointestinal, pero también pueden ser causadas por otras bacterias que se encuentran en las manos u objetos que entran en contacto con la uretra. Otros factores que pueden aumentar el riesgo de ITU incluyen un sistema inmunológico debilitado, ciertos métodos anticonceptivos y el uso de algunos medicamentos.
Las mujeres corren un mayor riesgo de padecer cistitis debido a su anatomía. Esto se debe a la longitud más corta de la uretra femenina y la corta distancia entre dicho órgano y el ano. Esto facilita la entrada de bacterias a las vías urinarias.
Otros factores que pueden aumentar el riesgo de contraer infecciones urinarias en mujeres son una infección urinaria anterior y cambios en las bacterias que viven dentro de la flora vaginal (la menopausia o usar espermicidas pueden ocasionar estos cambios).
Las infecciones urinarias en hombres pueden ser causadas por una variedad de factores, incluyendo el uso de un catéter, el uso de una sonda urinaria, la presencia de una próstata agrandada, la presencia de una infección de transmisión sexual y el uso de una sonda para orinar. Los hombres con diabetes también tienen un mayor riesgo de desarrollar una infección urinaria.
Para prevenir las infecciones urinarias y reducir el riesgo de sufrir una, puedes poner en práctica las siguientes medidas:
El tratamiento para una infección urinaria generalmente implica el uso de antibióticos, estos se pueden tomar por vía oral o intravenosa. Es importante terminar todo el curso de antibióticos que recomiende tu médico, incluso si los síntomas mejoran. De esta manera, te aseguras de que la infección se elimine por completo. Además, deberás beber muchos líquidos para ayudar a expulsar las bacterias del tracto urinario.
Recuerda que una buena higiene y cambios en el estilo de vida pueden prevenir las infecciones urinarias. Si crees que puedes tener una ITU, es importante buscar atención médica lo antes posible para asegurarse de que la infección se trate adecuadamente.
No olvidemos que la medicación con antibióticos debe ser indicada por un médico, nunca debemos automedicarnos. Si lo hacemos, corremos el riesgo de que las bacterias generen resistencia a los antibióticos. Si tenemos muchas molestias, podemos usar un analgésico de vías urinarias y a la par llevar una muestra de orina al laboratorio para urocultivo.
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Dra Lorena Campódónico.
Ginecóloga
Referencia
Mayo Clinic. Infecciones de las vías urirarias: Recuperado en: https://www.mayoclinic.org/es-es/diseases-conditions/urinary-tract-infection/symptoms-causes/syc-20353447
Centros para el control y la prevención de enfermedades. Infección urinaria. Recuperado en: https://www.cdc.gov/antibiotic-use/sp/uti.html#:~:text=Las%20infecciones%20urinarias%20son%20m%C3%A1s,Una%20infecci%C3%B3n%20urinaria%20anterior.