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Enfermedades del Sistema Excretor: Cuáles Debes Conocer
Categoría | Salud familiar
17/03/2022

Enfermedades del Sistema Excretor: Cuáles Debes Conocer

Índice de contenidos

 

Millones de personas en todo el mundo han sido diagnosticadas de algún trastorno del aparato excretor. En este artículo vamos a echar un vistazo a las enfermedades del aparato excretor que debes conocer.

 

El sistema excretor es una parte vital de nuestro cuerpo que se encarga de la eliminación de desechos.

Sin embargo, es comúnmente subestimado y muchas personas no le dan la atención que merece hasta que se presentan problemas. 

Las enfermedades del sistema excretor pueden ser graves y afectar significativamente la calidad de vida.

Por esta razón, es importante conocer los síntomas y tratamientos para estar preparados en caso de que se presenten.

Visión general del sistema excretor

El sistema excretor está compuesto por ciertos órganos, como los riñones y la vejiga, que se encargan de filtrar los productos de desecho del cuerpo.

Estos productos filtrados se eliminan por vía de la orina. 

Dentro de esta compleja red se esconde algo esencial: la capacidad de expulsar sustancias tóxicas de nuestro cuerpo.

Enfermedades del sistema excretor y síntomas

Estas son algunas de las enfermedades más comunes del sistema excretor.

Enfermedad renal

La enfermedad renal es un trastorno común del sistema excretor que se caracteriza por la pérdida progresiva de la capacidad de los riñones de filtrar los desechos.

Puede producirse debido a diversos factores, como infecciones, trastornos autoinmunitarios, hipertensión arterial o la diabetes, entre otros.

Los síntomas de la enfermedad renal incluyen fatiga, pérdida de apetito, náuseas y vómitos.

También, disminución en la cantidad de orina, presión arterial alta, hinchazón en los tobillos y disminución de la agudeza mental. 

Las opciones de tratamiento de la insuficiencia renal crónica varían según la gravedad de la enfermedad. 

En algunos casos, pueden recomendarse modificaciones del estilo de vida, como reducir el consumo de sal, aumentar la actividad física y limitar el consumo de alcohol. 

En los casos más graves, puede ser necesaria la diálisis o el trasplante de riñón. 

Es importante pedir consejo médico para determinar el mejor curso de acción.

Cálculos renales

Los cálculos renales son masas sólidas formadas por cristales diminutos que pueden depositarse en los riñones. 

Estos cálculos pueden llegar a alcanzar hasta 1-2 centímetros de diámetro. 

El dolor en la zona y la presencia de sangre en la orina son los síntomas más frecuentes asociados a los cálculos renales, aunque también pueden aparecer náuseas, vómitos y fiebre. 

Además, el dolor causado por los cálculos puede ser bastante intenso, y puede ir desde un dolor sordo hasta una sensación aguda y punzante. 

Infecciones del tracto urinario

Las infecciones del tracto urinario son un tipo común de infección que puede afectar a cualquier parte del sistema urinario, incluida la vejiga, los riñones, los uréteres o la uretra. 

Los síntomas incluyen dolor urente al orinar, necesidad frecuente y urgente de orinar, orina turbia, dolor al orinar y diarrea.

Este tipo de infecciones suelen tratarse con antibióticos y otros medicamentos para controlar los síntomas.

Las infecciones más comunes del tracto urinario son la nefritis y la cistitis.

La nefritis es una inflamación de los riñones que puede causar síntomas como dolor en la zona abdominal acompañado de fiebre, náuseas y vómitos. 

La cistitis es una inflamación de la vejiga que también suele deberse a una infección bacteriana. 

Esto provoca micciones frecuentes y dolorosas en las que la persona puede no ser capaz de terminar de vaciar la vejiga, junto con otros síntomas como sensación de fatiga o malestar en la región abdominal inferior. 

Tanto la nefritis como la cistitis pueden tener causas similares y requieren un diagnóstico adecuado para el plan de tratamiento más eficaz.

Cáncer de vejiga

El cáncer de vejiga afecta al revestimiento interno de la vejiga. 

Los síntomas pueden incluir sangre en la orina, dolor o sensación de quemazón al orinar, necesidad frecuente de orinar, dolor lumbar y molestias pélvicas. 

El tratamiento del cáncer de vejiga puede incluir cirugía, radioterapia, quimioterapia o inmunoterapia. 

La detección precoz es clave para el éxito del tratamiento del cáncer de vejiga.

Cáncer de riñón

Cuando a una persona se le diagnostica cáncer de riñón, suele presentar síntomas como dolor persistente en los costados, sangre en la orina y fatiga.

El tratamiento del cáncer de riñón puede variar en función de lo avanzada que esté la enfermedad de la persona, pero los tratamientos pueden incluir cirugía para extirpar el tumor o para extirpar uno o ambos riñones, quimioterapia, inmunoterapia o radioterapia. 

Es importante conocer las enfermedades asociadas al sistema excretor y sus síntomas. Tomar medidas preventivas, como beber mucho líquido y orinar con frecuencia, puede ayudar a reducir el riesgo de desarrollar determinadas enfermedades. Si experimenta algún síntomas que sugieran un trastorno del sistema excretor, no dude en acudir al médico. Un diagnóstico y tratamiento precoces pueden mejorar mucho sus posibilidades de éxito.

Diagnóstico y tratamiento de las enfermedades del aparato excretor

Ya se trate de cálculos renales, infecciones del tracto urinario o cualquier otra cosa relacionada con este sistema, siempre es importante obtener un diagnóstico y un tratamiento adecuados lo antes posible. 

Para ello, debes consultar a un profesional médico para que te evalúe y asesore sobre tus síntomas específicos. 

En función de los resultados de la evaluación, es posible que debas tomar un simple medicamento oral o bien someterte a una opción más severa, como diálisis o incluso cirugía. 

No obstante, sea cual sea el diagnóstico, es fundamental seguir las instrucciones del médico para obtener el mejor resultado posible.

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Consejos de prevención de las enfermedades del aparato excretor  

Cuidar nuestro sistema excretor es absolutamente esencial para llevar una vida sana. 

En primer lugar, es primordial mantener un peso saludable. 

Seguir una dieta baja en sodio y grasa, pero rica en vitaminas y minerales, es una forma estupenda de mantener tu organismo funcionando de forma óptima. 

Además, la actividad física regular es esencial, recomendándose un mínimo de 30 minutos de ejercicio al día. 

Fumar y beber alcohol deben evitarse o reducirse al mínimo, ya que ambos pueden ser perjudiciales para tu salud física. 

Igualmente, las revisiones médicas periódicas son imprescindibles. 

Un simple análisis de orina puede verificar fácilmente los niveles de ácido úrico y el buen funcionamiento de tus riñones. 

Además, bebe mucha agua a lo largo del día; eliminarás toxinas y garantizarás una hidratación adecuada. 

Cuándo acudir al médico

Si no te encuentras bien y presentas alguno de los posibles síntomas asociados a las enfermedades del tracto excretor, como dolor, cambios en el aspecto de la orina o cambios en la micción, es importante que acudas al médico de inmediato. 

El médico puede darte un diagnóstico preciso y crear el mejor plan de tratamiento adaptado a tus necesidades individuales. 

No dejes que los síntomas persistan; toma las riendas de tu salud y concerta una cita con tu médico hoy mismo.

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