El ciclo menstrual es parte de la vida de toda mujer en etapa fértil, y aunque lo común es que toda esta fase dure un promedio regular de 28 días, en ciertos casos el periodo se presenta dos veces al mes o se ausenta por varios meses. Es esto a lo que llamamos un Periodo Irregular.
Entre las posibles condiciones que llevan a este suceso, están: la amenorrea, la oligomenorrea, la falla ovárica prematura y la endometriosis; sin embargo, la principal causa de estas condiciones es el síndrome del ovario poliquístico.
En un ciclo regular, los óvulos maduros y listos para ser fecundados se liberan de los ovarios; lo que se conoce como ovulación. Cuando ocurre el síndrome del ovario poliquístico, los óvulos son retenidos por los quistes que alcanzan hasta los 8mm de tamaño y rodean los ovarios.
Esta es una de las causas más comunes de los periodos irregulares; llegando, en casos extremos, a ocasionar infertilidad. Generalmente es padecido por mujeres que rodean los 20 o 30 años; sin embargo, también afecta a las niñas y adolescentes en menor medida.
Este síndrome está altamente asociado a los trastornos metabólicos y un alto nivel de hormonas masculinas en el cuerpo; por lo que a la presencia de estos síntomas es un motivo importante para que acudas a un ginecólogo de confianza que te ayude a tratarlo de inmediato.
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Por lo general, un médico especialista que tratará esta enfermedad, para comprobar su aparición pide realizar al paciente algunos exámenes de sangre; de ese modo, se mide el nivel de hormonas para verificar si existe un desorden que esté causando este mal. De ser así, los tratamientos más comunes incluyen el uso de pastillas anticonceptivas recomendadas por el médico especialista.
Por último, no olvides acudir a un chequeo médico dos veces al año en promedio, para verificar tu salud. Si tienes el síndrome de ovarios poliquísticos, es recomendable también revisar los niveles de glucosa, ya que esta enfermedad puede, además de llevar a tener periodos irregulares, causar diabetes.